No debes perderte
Entre dos cerros, aparecen pronto, las escasas casas del pueblo de Terque. Uno de ellos, el cerro de Marchena, albergó el primitivo asentamiento árabe y quizá romano que da origen a toda la Taha.
No obstante pueden verse restos de aljibes y lienzos de la importante fortificación musulmana, llamando la atención, el hallazgo de lápidas funerarias con escritura cúfica.
Le proponemos que deje aparcado su automóvil y pasee por su trama urbana. Este será el único modo de admirar las bellas edificaciones burguesas de este municipio.
La prosperidad proveniente del aprovechamiento minero de Sierra de Gádor y la explotación de la uva de mesa, provocaron un engrandecimiento de la localidad, que vio como se levantaban excelentes mansiones de ricos propietarios, como las de Santiesteban, Paniagua, Los Porras, o la más famosa: Los Caballitos; que recibe este nombre por los "grifos" -animales fantásticos de influencia oriental, que adornan el edificio.
Panorámica de Terque
Deténgase a contemplar las fantásticas rejerías de sus vanos, así como las impresionantes palmeras y araucarias que adornan sus jardines y que siempre han significado distinción para sus moradores. Si todavía no lo ha hecho, entre en la iglesia de Santiago Apóstol, del siglo XVI, y disfrute del estilo múdejar y del retablo churrigueresco de su interior.